Entrevista a Juan Carlos Angulo, socio de Riba Vidal Abogados
Hace unos días los sindicatos y el Gobierno acordaron un nuevo incremento del salario mínimo interprofesional (SMI) con el desacuerdo de los empresarios, que son los que han de hacer frente a la subida. El salario mínimo ha pasado de 1.080 a 1.134 euros, lo que supone un incremento acumulado del 52,6% desde el 2018 (un 30% real descontando la inflación). El SMI pasa a ser el 61% del salario promedio y uno de los más costosos de toda la Unión Europea, solo por detrás de Francia. Para hablar sobre este asunto, en nuestro programa hemos entrevistado a Juan Carlos Angulo, socio de Riba Vidal Abogados.
Compartimos un fragmento de la entrevista:
Pregunta: Se ha vuelto a subir el salario mínimo, con la correspondiente polémica. Los empresarios no están de acuerdo e incluso hay fuentes que hablan de la destrucción de 160.000 puestos de trabajo. ¿Es un dato alarmista o real?
Respuesta: Los empresarios únicamente han comparecido o han negociado o han admitido la subida del año 2020. La del 2021 y 2022 se han negado a que se realice. Se inició una negociación y por parte de la CEOE y los empresarios se propuso una subida del 3% y luego posteriormente, depende de cómo fuera el IPC, de uno más añadido, pero básicamente toda la negativa del sector empresarial viene un poco por el aumento de costes que supone. Ha habido una subida, muy pequeña, pero ha habido una subida de cotizaciones, las materias primas están subiendo, y concretamente la oposición viene por dos cuestiones: una básicamente que eran las dos peticiones de la patronal era la afectación de esa subida a sectores como el sector agrario, que realmente está perdiendo afiliados a la Seguridad Social y que la situación es un poco complicada, y subir este 5% parece un perjuicio bastante importante. Luego también pedía que se indexara porque esto también afecta a los contratos públicos, a las legislaciones, a todos los contratos públicos que se han suscrito durante los últimos años. Esta pequeña subida, al ser estas situaciones tan ajustadas en los precios, pequeñas subidas tienen una incidencia grave. Y luego también otros sectores minoritarios como pueden ser los empleados del hogar, se van a ver beneficiados por la subida, pero a la vez en muchas situaciones lo que se está viendo es que hay un descenso de afiliaciones, es decir, se están perdiendo cotizaciones en este sentido, porque la gente no da de alta a estos empleados o los da de baja para no tener que hacer frente a estos incrementos. Básicamente estas eran las peticiones y un poco la oposición por parte de la patronal y lo que ha evitado al final que haya un acuerdo.
¡Dale al play para escuchar la entrevista completa!
