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El nuevo impuesto al plástico indigna al sector

Entrevista a Aleix Triana, CEO de Industrias Plásticas Triana 

En nuestro programa hemos hablado de una ley que entró en vigor hace poco. Es la Ley 7/2022 de Residuos y Suelos contaminados para una Economía Circular. Es una ley que conlleva un nuevo impuesto: el impuesto al plástico. Para conocer los detalles de esta ley y de cómo se aplica a las empresas, hemos entrevistado a Aleix Triana, CEO de Industrias Plásticas Triana, una empresa dedicada precisamente a la fabricación de productos sanitarios y envases de plástico para diferentes sectores.

Compartimos un fragmento de la entrevista:

Pregunta: ¿En qué consiste este nuevo impuesto al plástico? ¿Ha entrado ya en vigor? ¿Lo estáis pagando ya, las empresas?

Respuesta: Sí, ya ha entrado en vigor, lo estamos pagando desde el 1 de enero. En sí no es un impuesto al plástico, sino que es un impuesto a los envases de un solo uso que están fabricados con plástico no reciclado, es decir, con plástico de primer uso.

P: ¿Quién está obligado a pagar este impuesto? ¿Empresas que fabriquen envases de uno solo uso?

R: Sí, una tipología de los contribuyentes que tenemos que pagar somos nosotros como los fabricantes de envases plásticos, pero no solo estos, sino también cualquier empresa que importe envases de plásticos, ya sea vacíos o llenos. ¿Y esto qué puede ser? Pues puede ser desde un supermercado que compra productos a la Unión Europea, pero también puede ser un restaurante que compra comida, o también puede ser una empresa que compra unos ordenadores a Francia, Italia o Corea.

P: Es decir, que hay mucha gente sobre la que repercutirá este impuesto que no se dedica explícitamente al plástico.

R: El primer foco está sobre nosotros, sobre los fabricantes, porque es obvio, pero tenemos que pensar que el plástico es un material que se utiliza para envasar muchas cosas. Sabemos toda la polémica que hay sobre los envases plásticos, de aquí sale este impuesto, diríamos que viene guiado por una buena intención, que es reducir la polución, pero no viene guiado por un análisis riguroso y científico. Entonces lleva a crear este impuesto que concretamente es de 450 euros por tonelada de plástico no reciclado.

P: Esto, para una empresa como la vuestra, repercute, supongo que reduciendo el margen de beneficios.

¡Dale al play para escuchar la entrevista completa!

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