Entrevista a María Carlavilla, fundadora y CEO de Carlavilla Studio
CARLAVILLA Studio es un estudio de confección a medida para novias e invitadas, situado en San Sebastián, donde la artesanía, los tejidos y la cercanía son su esencia. Se trata de un proyecto apoyado por la Kutxa Fundazioa y la aceleradora de startups BerriUp. Para conocer más detalles sobre él, hemos entrevistado aMaría Carlavilla, fundadora y CEO de Carlavilla Studio.
Pregunta: ¿Cómo surgió Carlavilla Studio?
Respuesta: Cuéntanos. Pues la verdad que todo surgió cuando me fui a trabajar a Budapest. Trabajé allí en una empresa de moda y ahí descubrí lo que era el patronaje. Entonces me enamoré de lo que era el patronaje y cuando volví a San Sebastián a Sabes decidí que tenía que estudiar eso. Y lo dejé todo y empecé a estudiar patronaje. También es verdad que me pilló la pandemia de por medio. Me dio tiempo a pensar y dije, venga, lo dejo todo y me pongo a lo que realmente me gusta.
Pregunta: Patronaje, si tú me dices ven, lo dejo todo. Y ahí fuiste, ¿no? Pero claro, una empresa de confección de vestidos de novia es un negocio arriesgado. ¿Cómo te surgió en la cabeza exactamente dedicarte a este sector y cómo fueron los inicios?
Respuesta: Yo creo que siempre lo tuve intrínseco en mí. Siempre me había gustado el sector. Y los inicios fueron a través de estudiar el patronaje, empecé a hacer a mis amigas los primeros vestidos en las bodas. De ellas hasta todas sus amigas, a sus madres, a sus tías… Y es donde estamos hoy. Al final, que puedo decir que tengo una pequeñita empresa.
Pregunta: Por supuesto que está. ¿Cómo es el proceso de confección de un producto tan especial como es un vestido de novia, un vestido a medida, desde la idea inicial hasta la entrega final?
Respuesta: Me llaman, obviamente, y vienen a mi estudio, en San Sebastián. Ahí hacemos una pequeña entrevista donde ellas me cuentan lo que quieren, dónde se van a casar, cuántos invitados van, dónde es… Y ahí empezamos a crear los primeros bocetos. Esos bocetos que les enseño y ellas eligen el que más les gusta. Y a raíz de eso hacemos una primera prueba en toile. El toile es un tejido de algodón en el que se fija el primer patrón inicial y ahí se pueden hacer cambios todavía. Fijamos el diseño.
Pregunta: ¿Un vestido de algodón?
Respuesta: Exacto. Como en una tela de algodón, digamos que permite que el patrón se fije bien. Es sobre todo una prueba para nosotras en las que vemos que todo está perfecto para ya poder pasar al tejido siguiente que normalmente es más caro, más delicado y que ahí quede todo perfecto.
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